ALGUNOS FRAGMENTOS DE:
El 14 de abril de 1774 partió Ordoñez junto con 47 soldados, un capitán, cuatro sargentos y un cabo hacia Traslasierra.
El 23 de abril llegaron al paraje La Ciénaga. Desde allí Ordoñez envió un auto a los “…apellidados el común…” solicitándoles que volvieran a la tranquilidad y aclarando que “…mientras estuvieran subordinados serían oídos…” Durante cuatro días se alcanzaron contactos a través de cartas y esquelas con el juez pedáneo Tordesilla , el cura Rodríguez y con Basilio Quevedo.
La Dra. Punta en su investigacion expresa:
… en el expediente se adjunta el original de una nota, muy prolijamente escrito y enviado por “el común” el día 24 desde Pocho, en la que reconocían como Alcalde Ordinario de la Santa Hermandad y Maestre de Campo a Don Juan Tiburcio de Ordoñez. En ella le “suplicaban” que se dejara ver en el Bañado de Ambul, “… por la buena comodidad que hay…”, agregando que estaban pronto para oírle cuanto ordenara “… sin armas y sin intención mala, que es nuestro deseo comunicarle muchas cosas inconvenientes a este común…”. Agregaban que estaban dispuestos a “… aceptar con afecto…” al curar Guerrero y lo citaban a Ordoñez para dos días más tarde, firmando el escrito como “…el común, rendidisimos súbditos…” La nota finalizaba con un agregado: “… si a ud.no le parece lugar conductor por no haber decencia de casa para su persona sea en esta de Pocho, ..."
La respuesta de Ordoñez no se hizo esperar. Ese mismo día le respondieron comunicándoles que estaba conforme con que habían aceptado a los dos curas “… como buenos vasallos del rey…”, pero recordándoles que la situación estaba perjudicando a la sisa por los gastos y que “… contenido aunque el de la ( carta) suya me obliga ya a tratarlos como hijos me es preciso al mismo tiempo hacer respetar las órdenes que les he conferido en nombre del rey…” .
Al día siguiente, Ordoñez recibió dos cartas: una de Tordesillas y otra del cura. El primero le informó que una partida de cuatro o cinco hombres, encabezada por Pedro Valla, lo habían interceptado en la cañada de la Pampa de Pocho, llevándolo preso a la capilla de Pocho, y que él les prometidos había que iba a convencer a Ordoñez para que acepte las peticiones del común, porque de lo contrario él era hombre muerto.
La carta del cura Rodríguez le relataba que esa mañana habían apresado a Tordesillas y al alcalde Juan Tomás Olmedo, y que a él lo habían buscado a la salida de misa para que fuera a confesar aTordesillas. Cuando llegó“… tratando de apaciguar el tumulto …”se encontró con gente armada, en dos filas ya Tordesillas“… puesto en suplicio ya para quitarle la vida…”A pesar del panorama que describía el cura, le reiteraba que fuera sin ningún temor .
Poco después, recibió una tercera carta. Se trató de un pedido del común expresando que sus pretensiones estaban dirigidas “… al bien público de este valle …” reiterando que Isasa y Tordesillas salieran del valle, agregando que gracias a la intervención del cura no habían “…hecho con Tordesillas lo que el común pedía…”.
Poema mural, atrio de la Capilla de Villa de Pocho. Muralista: Juan Danna, Ceramista José Villasegura, Texto Gladys Acevedo. |