Cerro Ciénaga. Fotografía: Alejandra Ferreyra.

martes, 23 de abril de 2019

ABRIL, RECORRIENDO EL PASADO EN TRASLASIERRA.


28 DE ABRIL 1774 - 2019

245 AÑOS DESDE LA FIRMA DEL PACTO DE LOS CHAÑARES.

Este mes, tiempo en que el otoño viste de colores mágicos el paisaje,  es también momento para conectarnos con el pasado. Tiempo de reflexión ante conceptos que impregnan nuestra historia: nepotismo, opresión, corrupción, y tantos otros.

Ocultar acontecimientos que dan identidad a nuestra cultura, es tergiversar y debilitar la Memoria Colectiva, impactando en la construcción del concepto de patriotismo. La Memoria Colectiva es el manantial desde donde surgen los modelos y ejemplos de hombres y mujeres que dieron sus vidas por este presente que nos abraza.

El Pacto de Los Chañares estuvo oculto mucho tiempo; pero como siempre, la verdad cuando es el momento, surge luminosa desde la oscuridad del olvido.  2019, marca 245 años desde la firma de este Pacto entre El Común y las autoridades españolas, estableciéndose un acuerdo entre las partes, en un lugar borrado por el tiempo llamado Los Chañares, a escasos metros de la centenaria Capilla Inmaculada Concepción de Villa de Pocho, perteneciente al antiguo Curato de Traslasierra.

El punto de referencia es 28 de abril de 1774, cuando aún pertenecíamos al Virreinato del Perú, y por ende a la Gobernación de Córdoba del Tucumán. Tiempos con una escenografía totalmente diferente, en un contexto socio económico propios de la vida colonial y con la angustia de una vida de opresión, miedos y persistente cansancio al estar permanentemente doblegados a la voluntad de quienes, con total impunidad, los utilizaban para beneficio propio.

En ese entonces el Curato de Traslasierra comprendía los actuales departamentos de Minas, Pocho, San Alberto y San Javier con una densidad poblacional importante distribuida en   109 lugares, con un promedio de 300 habitantes por poblado. En la documentación consultada se mencionan como protagonistas de la rebelión entre 200 y 300 paisanos provenientes de: Ambul, Pocho, Las Tapias, Río de los Sauces, Santa Rosa, Los Cerros, San Lorenzo, La Tablada, Panaholma, Las Palmas Nono, San Javier entre otros. 


ESCENARIO DE LA GESTA LIBERTARIA EN TRASLASIERRA.




La Rebelión de El Común tuvo como escenario el antiguo Curato de Traslasierra. Con su particular topografía brindó  a los valientes traserranos el contexto propicio para establecer redes de comunicación llevando como bandera el grito libertario.

En ese tiempo la Capilla de Villa de Pocho, funcionaba como Parroquia del Curato por lo que se transformó en el lugar de concentración y encuentro entre los "rebeldes" y las autoridades españolas para formalizar el pacto. 

En la siguiente imagen, extracción de Libro 2° Bautismos, 1773 - 1797 podemos constatar la observación anterior incluyendo la participación del Cura Dr. Simón Funes Pabon, uno de los protagonistas de los hechos que se desarrollaron en 1774.


Qué sabemos acerca de esta Capilla?

Para responder me remitiré a un trabajo de la Sra. Claudia Ibañez quien hace tiempo muy gentilmente me facilitó y a quien agradezco profundamente para poder difundirlo.

Capilla "Inmaculada Concepción" de Villa de Pocho, Departamento Pocho. Año 1999.

Doña Flora Brizuela, antigua vecina quien había alcanzado a sobrevivir a sus tres consecutivos maridos, en 1774 hizo un testamento. En él declaraba que había "edificado una capilla" bajo la advocación de Nuestra Señora de la Concepción, abarcando su construcción -según el trabajo consultado- entre 1746  y 1774.

Su voluntad póstuma expresada en documentos fehacientes en poder de particulares, fue:

  •  que dicha capilla quedara para que "la administre y cuide como patrón" su sobrino don Claudio Ceballos. "Advierto -dice el documento- que dejo de tierras para la capilla, a la parte del norte hasta la punta de la primera loma de piedras, a la parte del sud hasta una zanja que hace del otro lado del horno de quemar ladrillos y a la parte del naciente hasta el primer ojo de agua, como que sale de mi casa para la iglesia, y al poniente a topar con el arroyo, y el número de ornamentos necesarios, los que aparecen en el inventario que de ellos hizo el Dr Joseph Tejeda Liendo, Cura de este beneficio y lo más que hubiere que agregar y lo declaro hasta que conste" .
  • En otras claúsulas testamentarias también alude a la capilla: ...."Declaro -dice en una de ellas- que dejo un mulatillo llamado Joseph Ermenegildo, dedicado par a sacristán de dicha capilla; y si en algún tiempo quisiere ser vendido, mando no se le impida, cuya venta correrá por mano del patrón de dicha capilla, y dicha plata, en caso de ser vendido dicho mulato, es mi absoluta voluntad se refunda en adorno de dicha capilla". 
  • Agrega en otra parte, que deja ... "dos mulas chúcaras para que se vendan para el bien de la capilla, y también una petaca, dos pailas y otras cosas con el mismo fin".
  •  Por otra cláusula deja ..." para Nuestra Señora una esclava llamada Chavela Sosa".
Como dueña del templo, doña Flora les daba en él sepultura a los cristianos del lugar. En tal concepto declaró, al testar, que personas le daban aún "dos ponchos" de sepultura.
La piadosa Flora Brizuela legó parte de su propiedad a Laurencia Pereyra "en justa recompensa de sus servicios", y esta se la dio en dote a su hija María Paulina Calderón quien contrajo enlace con Domingo Olmedo. (Archivo Histórico de la Provincia de Córdoba, Escribanía I, Legajo 389, Expediente 4, Año 1777, y Legajo 426, Expediente 3, Año 1796)

Con respecto al edificio detalla el arquitecto Mario  Buschiazzo, "Arquitectura religiosa popular en la Argentina"en el Boletín de la Comisión Nacional de Museos y Monumentos Históricos, Año IV, N° 4, Buenos Aires, 1942  que ... la capilla de Pocho es una de las pocas cuyo autor se conoce, pues fue el alarife Juan Pedro Perales, según lo certifica en el testamento su esposa doña Margarita Martínez, declarando asimismo en dicho documento, que recibió un lote de terreno en pago de su trabajo".

Interesante lo que expone a continuación el trabajo consultado:
"Integraban la antigua estancia de Pocho, hasta 1746, las tierras de Mogigasta y SAuce que el Capitán Estanialao Toledo Pimentel vendió al Capitán Francisco Calderón en noviembre de aquel año por 500 pesos "de 8 reales". Las tales tierras fueron deslindadas del resto de Pocho por un juez comisionado: Suazo de Chinchilla.
Para el lado de Pachango llegan hasta los confines de la estancia. Para la sierra "todo lo que tuviera hasta las caídas del monte, y para la laguna otra legua y para la parte de Pocho hasta el lindero y mojón que el dicho juez puso enla mensura que hizo de una legua cogiendo por centro la capilla vieja de Pocho hasta donde dio una legua y de dicho mojón cogiendo el rumbo y deresera a la sierra que cae al lado, las cuales son las tierras de Mogigasta y Sauce."
Esto nos hace suponer que antes de que Flora Brizuela adquiriera  la estancia de Pocho, donde hizo construir la capilla, ya había una "capilla vieja" que sirvió en 1746 como punto de referencia para la medición y deslinde de aquellas tierras." Información que obra en documentos en poder de particulares.

INTERPRETACIONES PLÁSTICAS 
DE DIFERENTES PINTORES, EN DISTINTOS TIEMPOS.






3 comentarios:

jokomar dijo...

Muy buena información! En mi humilde opinion, la capilla de Pocho es la más bella entre todas sus hermanas coloniales de Argentina,tal vez igualada por la de Casabindo (Jujuy). Además, tiene el inmenso valor de haber sido pintada por algunos de los más grandes paisajistas argentinos: Fernando Fader, Luis de Aquino y José Malanca. Juan Carlos Balmas

IDENTIDAD POCHANA dijo...

Muchísimas gracias por tu interés y tu comentario Juan Carlos. Un nuevo año para recordar y profundizar en nuestras raíces.
Saludos Cordiales
Gladys Acevedo

IDENTIDAD POCHANA dijo...

Muchísimas gracias por tu interés y tu comentario Juan Carlos. Un nuevo año para recordar y profundizar en nuestras raíces.
Saludos Cordiales
Gladys Acevedo